Artículo 27 apartado 3 de la Constitución Española de 1978
Los poderes públicos garantizan el derecho que asiste a los padres para que sus hijos reciban la formación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones.
Primer párrafo del Artículo II del Acuerdo entre el Estado Español y la Santa Sede sobre enseñanzas y culturas.
Los planes educativos… (en los niveles de Educación Preescolar, de Educación General Básica (EGB) y de Bachillerato Unificado Polivalente (BUP) y Grados de Formación Profesional correspondientes a los alumnos de las mismas edades)… incluirán la enseñanza de la religión católica en todos los Centros de educación, en condiciones equiparables a las demás disciplinas fundamentales.
“Equiparar” según el Diccionario de la Lengua Española (Vigésima edición):
Considerar a alguien o algo igual o equivalente a otra persona o cosa
¿Por qué queríamos empezar así? Lo mejor que se puede hacer para defender algo, es saber lo qué es. Examinando varios documentos en los que se hace referencia a la enseñanza de la Religión y Moral Católica, hemos podido comprobar que no se le da la importancia, que legalmente, debe tener.
Un Área que se evalúa pero no es computable, que en algunos centros se intenta apartar y menospreciar. Unos compañeros que no son considerados parte del claustro y son excluidos. La Constitución Española no dice eso. Es curioso que este punto de la educación religiosa esté justo delante del que dice “La enseñanza básica es obligatoria y gratuita”. No aparece en la disposición adicional, ni en la última hoja en pequeñito, como se puede ver en las leyes de educación.
Desde ANPE queremos defender esta área que como viene en su curriculum “Contribuye a la calidad de la educación desde la propuesta y desarrollo de unos conocimientos, valores y actitudes. Desarrollando especialmente la capacidad trascendente del alumno, facilitándole una propuesta de sentido último para su vida e iluminando el fundamento de aquellos valores comunes que hacen posible una convivencia libre, pacífica y solidaria.”
Todos queremos una educación integral. Y en las leyes educativas aparece reflejado. Ya Aristóteles hablaba de ello: “Es preciso, pues desarrollar y cultivar todas estas partes que integran la naturaleza humana. No debe descuidarse ninguna potencia del hombre, entonces su educación debe ser integral.”
Y desde el curriculum del 2007 de Religión también se dice:
“No podría existir una formación integral y, por tanto, una educación de calidad, si no se desarrollasen todas las capacidades inherentes al ser humano, entre las cuales se encuentra constitutivamente la capacidad transcendente.”
Tabajamos por:
- El reconocimiento de la antigüedad y la formación (Trienios y sexenios)
- Un nuevo concurso de traslados.
- Mantener las ayudas económicas.
- Promover la presencia general de nuestro colectivo en la Mesa General de Empleados Públicos.
- Reducción del horario de trabajo de mayores de 55 años.
- Contratos de jornadas completas.
- Acuerdo de itinerancias.
- Un Convenio colectivo propio, como paso previo para su inclusión en el estatuto de la Función Pública docente.
Para conseguir todo esto, ANPE Madrid, ha apoyado siempre la clase de Religión. Escuchamos las propuestas de muchos compañeros, de las Delegaciones Diocesanas de Enseñanza y de otros miembros de la comunidad educativa. Pero para conseguir que el área de Religión tenga la importancia que se merece no podemos hacerlo solos. Necesitamos buscar unión también entre los diferentes sindicatos de profesores. Por eso vamos a promover la comunión entre los demás compañeros del comité de empresa, buscando siempre lo mejor para todos. Por eso desde ANPE se va a promover esta forma de trabajo en el comité, para crear un ambiente mejor y de la cual puedan salir propuestas más satisfactorias para todo el colectivo.
Shalom.
Pablo Coronado Romero.